El 28 de abril de 1862 el ejército de
oriente al mando del general Ignacio Zaragoza ordeno establecerse en las
cumbres de Acultzingo es ese entonces un pueblo no muy grande. La idea de
establecerse ahí era atacar por sorpresa al enemigo.
Cuando el general Laurenzes ordena ocupar las cumbres estas ya
habían sido tomadas por el ejército mexicano, el cual al ver a los franceses
apuntan fuego y empiezan los disparos. La
artillería y experiencia francesa se impuso ante los mexicanos dejando
así herido al general Arteaga .
Zaragoza al ver este suceso ordena la
retirada de las tropas mexicanas pues el plan había fallado debido a que no
contaban con la presencia de los conservadores. Los mexicanos pararon el fuego
y decidieron retirarse. Perdieron la batalla y se dirigieron a la ciudad de
puebla donde juraron que defenderían el estado hasta con sus vidas.
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